Un devastador ciclón pasó por el Sur de Brasil y dejó 11 muertos y 10 desaparecidos

Al menos 11 personas perdieron la vida y otras 10 continúan desaparecidas como consecuencia del paso devastador de un ciclón en el Sur de Brasil. El estado de Rio Grande do Sul se vio afectado por fuertes lluvias y vientos intensos, lo que provocó una situación de emergencia en la región.

La Defensa Civil de Rio Grande do Sul comunicó a través de Twitter: “Hubo 11 muertos después de las fuertes lluvias”. Afortunadamente, el número de personas desaparecidas se redujo a la mitad, pasando de 20 a 10, pero todas ellas se concentran en el municipio de Caraá, según informó la Defensa Civil.

Los daños materiales también fueron significativos, con un total de 3.713 personas afectadas en sus hogares y 697 desalojadas de zonas de alto riesgo durante el temporal que azotó la región entre el jueves y el viernes. Imágenes impactantes mostraron cómo un vehículo fue arrastrado por los fuertes vientos hasta un cementerio.

Entre las víctimas mortales se encuentra un bebé de apenas cuatro meses, según reportes de medios locales, informó la agencia de noticias AFP.

Una de las personas rescatadas en la ciudad de Sao Leopoldo, ubicada a media hora de Porto Alegre, relató su experiencia, diciendo: “El agua ya llegaba a la cintura en la casa. Gracias a Dios, los bomberos llegaron rápido y nos rescataron en barco. Parecía una pesadilla”.

Las operaciones de rescate han sido fundamentales para salvar vidas, con cerca de 2.400 personas rescatadas en los últimos dos días por los bomberos del estado. El gobernador de Rio Grande do Sul, Eduardo Leite, encabezó una misión de inspección en helicóptero el sábado, recorriendo las zonas más afectadas junto a autoridades gubernamentales y equipos de rescate.

En el municipio de Caraá, uno de los más golpeados por la tragedia, el gobierno local estableció un centro comunitario improvisado como albergue para acoger a cientos de personas cuyas viviendas sufrieron daños significativos.

El gobernador Leite expresó en un comunicado: “La situación de Caraá nos preocupa profundamente. Es fundamental que podamos, de manera integrada, mapear rápidamente las principales áreas afectadas e identificar a las personas que necesitan apoyo”.

Aunque las lluvias no se esperaban para el domingo en la región, las autoridades continúan trabajando en la protección y salvamento de vidas humanas.

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