Un hecho tragicómico ocurrió en la ciudad de Campinas, en San Pablo, Brasil cuando una mujer llevó al banco a un anciano muerto en silla de ruedas para cobrar el dinero de su pensión.
La insólita situación comenzó cuando la mujer decidió llamar a la sucursal del Banco do Brasil para avisar que había perdido la contraseña de la cuenta de su supuesto compañero, un viudo de 92 años, pero desde el banco exigieron la presencia del titular de la cuenta.
Según informó el portal globo.com, la mujer, lejos de cancelar su plan, puso en condiciones estéticas al muerto, lo sentó en la silla de ruedas y se presentó en la sucursal del banco. Allí explicó que el hombre no se sentía bien porque estaba cansado.
En la entidad bancaria notaron que algo extraño sucedía y de inmediato llamaron al personal de seguridad y a los bomberos, quienes descubrieron que el anciano llevaba varias horas fallecido.
El director del departamento de la Policía Judicial de San Pablo, informó que la autopsia marcaba que el anciano había muerto 12 horas antes de ser llevado hasta la sucursal bancaria.
La autoridad policial revelo que, a partir del informe, se iniciará “una investigación por fraude” dónde intentarán averiguar qué pensaba hacer con el sujeto y con el dinero que obtuviera.
Por su parte, los directivos del Banco do Brasil aseguraron que no había asuntos pendientes con la cuenta del beneficiario. “Se cumplió con todos los protocolos previstos en el contrato de prestación del servicio con la fuente de pago. Solo faltaban de credenciales para acceder a la cuenta y realizar el retiro”, manifestaron.