Por la nevada histórica, las cuencas tendrán más agua y alcanzarán valores de años medios en Mendoza

La crisis hídrica que vive Mendoza hace años genera que se esperen con muchas ansias las nevadas en la cordillera para que, una vez escurrida esa nieve, se transforme en agua para las diferentes cuencas de la provincia. Desde el Departamento General de Irrigación (DGI) auguran un buen pronóstico de caudal de ríos para la siguiente temporada y un aliciente en los niveles de sequía actuales.

Las nevadas tardías, sobre todo en la zona Sur de la provincia, han permitido una buena acumulación de nieve y eso se traduce directamente en el agua que tendrán los ríos que atraviesan todo el territorio provincial. Si bien todavía falta evaluar porque hay pronóstico de caída de nieve para las próximas semanas, desde Irrigación anticiparon a Los Andes que el año hídrico que empieza el 1 de octubre será “mejor que el anterior”.

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Rubén Villodas, a cargo de la Dirección de Gestión Hídrica de la DGI, explicó que las nevadas que se registraron – y que se registrarán- permiten anticipar que el pronóstico del caudal de ríos “será mayor al del año anterior porque habrá mayor volumen de agua, en comparación con los peores años de todas las cuencas”. “Habrá que ver qué sucede con las nevadas que se esperan para poder presentar el informe en octubre”, evaluó.

Por otro lado, el funcionario destacó que, según el cateo de invierno que hacen desde Irrigación para medir la cantidad de nieve acumulada, “las cuencas de Tunuyán y Diamante han acumulado mayor nieve que otras cuencas porque, generalmente, las cuencas del Sur acumulan más que las del Norte. Hasta ahora, todas las cuencas han alcanzado los valores de un año medio”.

Los cateos de las cuencas

Hace unos días, personal del Departamento General de Irrigación dio comienzo a los cateos de invierno, técnica que se realiza para medir la acumulación de nieve en las diferentes cuencas que tiene Mendoza.

Esta información recabada sirve para la confección del pronóstico de caudales de los ríos 2023/24, que se realiza usualmente en el mes de octubre. Según comentó Villodas, esta recopilación de datos aún no termina debido a que las nevadas que están ocurriendo en el Sur y en Alta Montaña.

Como conclusiones preliminares de los cateos, se pudo saber que todas las cuencas darán valores de años medios, incluso hay dos que superarán la acumulación de nieve prevista, que son la cuenca del río Tunuyán y la del río Diamante en San Rafael.

Se considera año medio al año promedio del registro histórico, que en todas las estaciones acumula casi 25 años.

Personal técnico de la Dirección de Gestión Hídrica de Irrigación voló desde Los Molles hasta la estación de Laguna del Diamante, y allí realizó las tareas de cateo de nieve. O sea, verificaron el Equivalente Agua Nieve (EAN), que es la cantidad de agua líquida almacenada en la nieve, en la estación nivométrica. Ese valor indica la columna de agua que, teóricamente, resultaría si la capa entera se derritiera instantáneamente.

Desde este ente autárquico señalaron también que la altura de nieve en el lugar era de aproximadamente dos metros. También se verificó que la Laguna del Diamante se encontraba congelada, algo que ocurrió en forma tardía este invierno, después del 10 de agosto. Donde todavía falta medir es en las estaciones de Laguna del Atuel y Valle Hermoso, algo que depende de las condiciones de tiempo en los próximos días.

En 2022, cuando Irrigación dio a conocer el Pronóstico de Caudales, el panorama no fue muy alentador: el caudal se los ríos se ubicó entre el 40 y 58% de un año considerado normal. Este estudio también permitió concluir que los ríos Grande, Atuel y Diamante, todos en el Sur, presentaron un nivel de sequía extrema, mientras que los ríos Mendoza, Tunuyán y Malargüe se ubicaron dentro de la sequía severa. Habrá que esperar por los datos de la temporada 2023/24.

La sequía

Sabido es que Mendoza se encuentra hace tiempo en crisis hídrica provocada por una sequía prolongada en todo el territorio. Ante esta situación y con este buen pronóstico de nieve en la montaña, Villodas reconoció que esta acumulación de precipitación nívea permitirá mejorar los niveles de sequía en algunas zonas. “Una vez que tengamos los resultados finales del pronóstico de caudales podremos determinar si en materia de crisis hídrica llegamos a un año normal o escaso”, aclaró.

El año hídrico se mide desde el 1 de octubre hasta el 30 de septiembre del año siguiente y, dentro de este período, es donde Irrigación prevé que mejorará el caudal de agua que traen los ríos y que ayudan a combatir la sequedad del ambiente, que impacta también en la economía, tanto en los sectores de la agricultura como de la ganadería.

Sobre el fenómeno climático El Niño, Villodas reconoció que no es evento en que su área se especialice pero que si “cuando se entra en la fase Niño, históricamente se producen más lluvias y nevadas, y en ese caso, desde Irrigación se evaluará en su momento”. “No se puede hacer antes la cantidad de agua acumulada por lluvia y la utilización de una parte para el sistema de riego”, aclaró.

Hasta cuándo nevará

Desde la Dirección de Contingencias Climáticas de la provincia explicaron que el pronóstico para el sector de la cordillera indica que hasta el lunes hay probabilidad de nevadas, las cuales se vienen acentuando con el paso de las semanas en un invierno atípico para Mendoza y el país, que comenzó “tarde” y tuvo días temperaturas superiores a las normales para esta época.

“Se esperan condiciones de estabilidad atmosférica con Zonda en altura hasta el sábado debido a la presencia de un sistema de alta presión en niveles medios de la atmósfera. El domingo se inestabilizan las condiciones meteorológicas con probabilidad de nevadas, situación que se extenderá hasta el lunes”, adelantó el meteorólogo Carlos Bustos.

La zona de Alta Montaña y la cordillera de Malargüe -en Las Leñas sobre todo- fueron los epicentros de intensos temporales de nieve que permitieron la acumulación nívea para que, luego del proceso de escurrimiento, se alimenten los caudales de los ríos provinciales.

Según afirmaron autoridades del paso Cristo Redentor, este jueves el cruce fronterizo a Chile estará abierto para todo tipo de vehículos (ayer fue solamente para camiones) y se espera que en los próximos días continúen las nevadas en la montaña pero con menor intensidad a las vividas días atrás. “Hay algo de inestabilidad pero no es un temporal”, expresaron.