Irrigación envió máquinas al secano lavallino para que el agua no salga de las lagunas

Desde hace más de 10 días el agua del río Mendoza sigue su camino por lagunas y cauces del departamento de Lavalle, hasta llegar al secano. Después de 15 años de sequía, el “milagro” lo provocó el deshielo de la nieve en alta montaña, que ha generado escenarios inesperados en la hidrografía mendocina actual.

Las postales que llegan desde los diferentes parajes de la localidad norteña, sobre todo desde el sistema de humedales denominado “Lagunas del Rosario”, muestran la alegría de los lugareños por el avance del agua.

El lunes 5 de febrero el Superintendente General de Irrigación, Sergio Marinelli, se reunió con el intendente, Edgardo González, quien definió como “una bendición” la llegada del agua a las localidades de Costa de Araujo, Gustavo André, Asunción, donde comienza el secano, y San José.

“Desde 2006 no había agua en estas lagunas. El lunes, con el intendente trabajamos en una agenda anual. Y el martes, junto a los Consejeros que forman el Honorable Tribunal Administrativo de Irrigación y otros funcionarios de nuestro organismo pudimos ver con los pobladores cómo aprovecharla al máximo”, afirmó Marinelli.

“Ya estamos trabajando en el lugar, con la colaboración del Presidente de la Comunidad Huarpe Lagunas del Rosario, Rubén Quiroga”, detalló además el Jefe de Irrigación.